A mi otro

Nathan es paciente del sector psiquiátrico del hospital de Lilas y compañero de Loïc desde hace años. Este último se ve profundamente herido e indefenso ante la crisis cada vez más violenta y absurda de su compañero que padece un tumor cerebral inoperable. Como si eso fuera poco para su desgracia, una nueva enfermera llega a perturbar este frágil período y amenaza su amor que creían indestructible. Las dudas sobre la verdadera identidad de Mathis minarán las certezas de Loïc tras la lectura del último manuscrito que escribió Nathan. Estas incertidumbres solo despertarán sospechas y sembrarán confusión. La perspectiva de que un ex amante haya contado más de lo que Nathan quiere admitir se declina bajo la apariencia de esta guapa enfermera cada vez más intrusiva y extraña. Sus intenciones podrían no ser tan nobles como las defendidas por el juramento hipocrático.